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Vuelve la maestra rusa de la ciencia ficción, tras «Tienes que mirar». Un híbrido entre «Black Mirror» y Samanta Schweblin que se ha convertido en un clásico del género.Una operación quirúrgica que extirpa el impulso sexual masculino, un tren que nos devuelve a cualquier punto del pasado, un invento genético que acerca la vida eterna... En esta mítica colección de relatos, Anna Starobinets retrata sin piedad una humanidad que se tambalea. Ciencia y religión, razón y pasiones, instinto y civilización: no hay pieza del puzle humano que escape a su mirada, a la vez devastadora y comprensiva. La glándula de Ícaro es una distopía que roza peligrosamente lo real, donde la ciencia es solo una excusa para abrir en canal a sus protagonistas y revelar sus engranajes. La obra de Starobinets es puro «horror lírico». Esta colección de relatos está repleta de pesadillas que amenazan no solo con cumplirse, sino con ser realidad en el momento en que se leen.CRÍTICA«Las historias de Starobinets abarcan del horror a la reinvención de mitologías y a la ciencia ficción distópica.» Mariana Enríquez, Página 12«La primera vez que leí a Starobinets tuve la sensación de que era a la vez Philip K. Dick, Stephen King, o una Shirley Jackson que hubiese leído más de la cuenta a Gógol.» Laura Fernández, El País«Anna Starobinets plantea extraños mundos y ciertos ambientes distópicos para hablar de problemas globales.» Paula Corroto, ElDiario.es«Con un estilo mordaz e incisivo, el humor negro es la principal arma de una Starobinets que no solo plantea ideas inquietantes, sino que partiendo de una situación aparentemente cotidiana profundiza en ellas hasta crear todo un microcosmos asfixiante, entre el terror y una ficción científica que resulta extrañamente creíble.» Javier Menéndez Llamazares, El Diario Montañés«Así nos gustan nuestras distopias: como un collejón que te obliga a abrir los ojos respecto a tu situación presente. Y algo nos dice que Starobinets sabe cómo dar las mejores collejas.» Fantasticmag«Partiendo de situaciones cotidianas, muchas veces dentro de los hogares, las historias de Starobinets se van volviendo aterradoras a medida que el uso de la tecnología ejerce una transformación en la persona que narra o en sus seres queridos» Alicia Medina, JotDown